Jornada organizada por la FABZ sobre movilidad    

El modelo sostenible de movilidad que necesita la Zaragoza de los próximos años pasa indefectiblemente por la construcción de la segunda línea del tranvía. Pero, eso sí, evitando los errores cometidos con la implantación del eje norte-sur. Esa fue la postura que contó con mayor predicamento entre los intervinientes en la segunda jornada de la Semana Europea de la Movilidad sostenible 2014, organizada por la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza (FABZ).

Dar mayor importancia al autobús, abordar con sentido común la irrupción de la bici como medio de transporte y la búsqueda de una fórmula que haga desaparecer una parte de los coches aparcados a diario en las calles fueron algunas de las propuestas que ayer se escucharon en la mesa redonda.

El director gerente del consorcio de transporte del Área Metropolitana, Juan Ortiz, llamó a conservar la «manejabilidad» de la que en su opinión disfruta Zaragoza por su tamaño medio y reconoció «la estructura muy débil de transporte» del entorno metropolitano. Por su parte, el jefe del departamento de planificación y diseño de la movilidad urbana del Ayuntamiento de Zaragoza, Antonio Ramos, aseguró que «solo hay un modelo sostenible y no se puede ir atrás» y resaltó la «rápida adaptación de la ciudad» a los cambios que han supuesto el priorizar los medios de transporte «amigables» como el tranvía y la bicicleta. «Hace siete años la bicicleta era una extravagancia que en el ayuntamiento nadie veía posible», recordó. Sobre la segunda línea del tranvía, Ramos advirtió de que «no funcionará bien si los buses no tienen la misma prioridad».

El gerente de Auzsa, Manuel Ramo, agradeció esa reivindicación entre tantas críticas recogidas en los últimos meses y propuso también prioridad semafórica y carriles únicos para que los autobuses cumplan las frecuencias. Por su parte, Ignacio Iraburu, representante de Los Tranvías SA reivindicó los éxitos que ha cosechado el tranvía: número de viajeros, premios, reducción de contaminación, e incluso seguridad (mérito quizá no demasiado conveniente de resaltar el día que el tranvía se cobraba su primera víctima mortal). Por último, el arquitecto Gerardo Molpeceres recomendó revisar la prioridad absoluta del tranvía y hacer cumplir las actuales normas de circulación de la bici, así como estudiar el estacionamiento regulado en algunos barrios en los que se acumulan los coches

Leave a Reply