El consejero de la DGA, José Luis Soro, cree que entrar en este eje básico «no significa renunciar a la Travesía Central».

El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, José Luis Soro, ha reconocido , en su primera comparecencia ante las Cortes de Aragón, que con los recursos de que dispone el ejecutivo en su bolsa de viviendas no se podrá hacer frente «ni de lejos» a todas las demandas actuales

En el capítulo de carreteras, ha indicado que ha recibido como «herencia» compromisos presupuestarios para 2016 que suman 50 millones de euros, con lo que es previsible que no haya demasiado margen para nuevas inversiones, mientras que en transporte ha hecho hincapié en que el reto es la elaboración de un mapa concesional para que esté en funcionamiento en enero de 2018, y la voluntad es contar con la máxima participación del sector.

Ha comentado también que el departamento ha comenzado a buscar sinergias con otras administraciones para exigir en Madrid y en la Unión Europea inversiones pendientes, entre ellas el Canfranc, el desdoblamiento de la N-232 y, respecto al de la N-II, el rescate anticipado de la AP-2.

 A este respecto, ha reiterado que el Ministerio de Fomento se ha comprometido a estudiar el coste de este rescate, ya que la concesión concluye en 2019, por lo que sería «absurdo» apostar por el desdoblamiento del tramo paralelo de la N-II cuando ya se ha anunciado que la liberalización «no se va a revocar».

«En carreteras no voy a reblar», ha enfatizado Soro, quien ha reconocido que tiene un importante trabajo en la priorización de los proyectos a acometer.

Apuesta por el corredor Cantábrico-Mediterráneo

También se ha referido al ferrocarril, reiterando su apuesta por el corredor Cantábrico-Mediterráneo.
En un «ejercicio de realismo», Soro comparte la propuesta de la Unión Europea de considerar este eje como un «ramal» del Corredor Mediterráneo, lo que significaría entrar en la red básica europea y, por lo tanto, más posibilidades de éxito para este trazado.
Asimismo, ante las preguntas del PP, ha insistido en que esta apuesta no significa «renunciar a la Travesía Central del Pirineo» como proyecto estratégico a largo plazo, a pesar de que tanto el Cantábrico-Mediterráneo como sobre todo el Canfranc son los dos planes «más urgentes», pero en ningún caso incompatibles

Leave a Reply